Despues del partido

Despues del juego le fui a seguir al lugar que me gusta ir los sabados. Mi amiga A. me pregunto varias veces durante el dia si iba a ir. Total fui. Me sentia cansado. Llegue pisteado claro. Me dio mucha risa lo que me dijo el cuate con el que vi el juego: "si eres como yo que toma tranquilo no hay pedo". Pero a cada rato pedia ronda. Si hubiera estado solo despues de la segunda le hubiera bajado. O quien sabe. A lo mejor, a pesar de estar Julio ahi, me hubiera sentido solo y... pero quien sabe. Total que llegue e increiblemente me hice pendejo con dos cervezas...

Durante el partido me dijo A que me llevara al cuate al antro. A mi se me ocurrio decirle que no lo invitaba porque la queria nada mas para mi solo... no me dijo nada (confieso que pense que no le habia gustado la idea, aunque luego le mande otro mensaje riendome. Cuando llegue, despues que ella, crei que la iba a encontrar como otras veces con sus amigos y no, esta vez estaba en otra mesa aparte! Cerca de sus camaradas pero en otra mesa. Separo mesa y todo el pedo. Todavia no lo creo.

Llegue con mucha hambre (la acidez ya me estaba matando). Pedi de cenar y ese fue el motivo por el que no segui tomando. Ademas, claro, tenia temor a no levantarme. En ese rato se me ocurrio pedirle que me contara algo. No me conto gran cosa. Cuando me pidio lo mismo me quede callado un rato (que raro). Lo primero que se me vino a la mente fue hablarle sobre Beto Zaragoza. Por su cara, por su expresion, me quede con la sensacion que reacciono igual que cuando el niño de preprimaria le conto a su cuate sobre la historia de Yambalalon y sus siete perros. Chale. (esa historia es de Juan Villoro)

No entre en muchos detalles. No le conte, por ejemplo, que ya casi no hablamos. La ultima vez me platico que la morra esa de las nalgas operadas ya no la ha vuelto a ver. Ese fue el motivo de la discordia. Me dio hueva y lo deje ahi. Preferi vagar por las avenidas de la ciudad oyendo la programacion nocturna de Imagen (en particular el que esta los sabados y termina como a la una o dos am). Prefiero la programacion nocturna, que es cuando ya dejaron de decir sus mamadas (no comparto del todo sus opiniones y eso por supuesto no las hace mamadas lo se. Me decepcionaron desde que salio Carmen Aristegui de ahi). Nos saludamos y cada quien se fue por su lado. Lo que no me gusto de la reaccion de mi amiga es que tanto trabajo me costo inventar un personaje y ella puso cara de que era una historia de niños... por eso digo que hubiera estado mejor contarle sobre Yambalalon que era un niño bien peligroso que robaba el banco central acompañado por sus siete perros. Tampoco le platique que tome el nombre (el apellido) de un señor que cantaba, los jueves bohemios, en un bar llamado La leyenda.

Pero bueno, sobrevivi.