domingo, 29 de mayo de 2011

Cosas que suponía que solamente le podían pasar a otros

Me invitaron a una fiesta. Nunca dije que iría. Me hice güey lo más que pude pero terminé yendo. Terminé yendo porque la fui a dejar a su casa (bueno a la casa donde era la fiesta). Ya que estaba ahí me volvió a invitar. Me negué pero acabé entrando a la fiesta que resultó tener karaoke. Ahora, sin querer, estaba del lado fastidioso de la fiesta. ¿Tienes fiesta? ¿Y los vecinos porqué te tienen que aguantar tus berridos? ¿Por qué? Claro, los míos no tuvieron que aguantarlos porque yo no canto ni aunque me paguen pero... Pero eso no es lo que quiero contar.

Entré pensando en quedarme diez minutos para luego salir corriendo. Sin embargo, no fue tan fácil. El caso es que conocí a los hijos de esta chava. Uno de ellos no se anduvo con rodeos: ¿y qué onda estás saliendo con mi mamá? Confieso que me sentí ridículo con mi respuesta. Encontramos el tema en común de Iron Maiden. Le pregunté si había ido a verlos y como respuesta me dijo que le había dolido que cantaran Blood Brothers (dedicada a los de Japón) y él no haber estado ahí. Fue muy claro su comentario pero le entendí otra cosa. Seguía aturdido y sorprendido por las preguntas que me estuvo haciendo antes de hablar de Iron Maiden. Supongo que quedé como pendejo (lo cual no es muy lejano de la realidad después de todo).

Total que me quedé a cenar y huí después de comerme unos tacos (muy buenos por cierto).

Nota: además de la pregunta normal, hasta cierto punto, lo que me dejó sorprendido fue su primer comentario: ¿eres profesor de universidad? ¿Me podrías conseguir el título? Luego me contó que, en ningún momento mencioné en qué universidad trabajo, pero dijo que ahí en donde trabajo (pero en prepa) le conseguían el título en $15 000...

Me dejó sin palabras francamente.

Hielo negro

¡Terminé hielo negro!

Interesante novela.

viernes, 27 de mayo de 2011

Alta traición (Me importa madre)

Mi mente, mi cerebro, me traicionó. Tenía pensado después de clase ir a algún lugar fresco a pensar sobre la situación extraña por la que he estado pasando el último año. Lo que ha estado pasando, entre otras cosas, es que camaradas míos (sobre todo los que tienen más años que yo) me han estado regañando y preguntando con desesperación: ¿qué haces ahí? Pretendía, entonces, dedicar un tiempo especial a reflexionar al respecto mientras me tomaba unas cheves. Unas tres, según yo, pero que finalmente fueron cuatro. Fueron muy pocas pero tampoco estaba en condiciones para dejarme caer.

La verdad es que pensar lo que se dice pensar no pensé. Reflexioné sobre otras cosas. Había mucho ruido y lo único que me estuvo pasando por la mente fueron lugares como el far west rodeo (en eso consiste la alta traición: uno quiere ponerse serio y el cerebro ofrece distractores). Todo por culpa de las canciones que estuvieron poniendo. En particular lo que me llevó a pensar al respecto fueron las rolas del grupo la mafia que programaron. Recordé que en el far, por ejemplo, hubo una temporada que tuvieron barra de libre. Luego la prohibieron pero vendían la cerveza a un peso! ¡Un peso! Era barra libre de todos modos. ¡Con quince o veinte pesos te ponías bien sonso! (¿zonso o zonzo?) Lo malo es que no me tocó. Ahhh. Cuando fui ya estaban las tecates a cinco pesos. Y eso, señoras y señores, es un abuso. Nada más por eso dejé de ir... La verdad es que dejé de ir porque mis camaradas no solían ir ahí lo cual, desde el punto de vista del pisto, fue una lástima. No tenían vocación definitivamente (¿y yo sí?).

Luego me acordé del diciembre-enero reciente pues una amiga nos estuvo contando que ella desde los quince años estuvo intentando entrar (al far) pero que la dejaron pasar hasta que llevó la credencial de elector. Recordó con nostalgia y emoción aquellos días en los que "agarrabas el pedo bien cabrón, todo el día, y te tomabas como diez cheves". Cuando mencionó eso no dejó de darme ternura, lo confieso. ¡¿Diez!? No suelo decir expresiones así pero: "ay cosha". Jaja. Me sirvió de pretexto para darle un abrazo y un beso. ¡¿Diez?! Bueno, el caso, es que ahora si se deja caer y anda como si nada (o al menos eso parece). En un descuido hasta toma más que yo. (ahorita cualquiera toma más que yo).

Esa época, de la que hablo, era cuando pegaban mucho las canciones de Selena (deveras) y las de Emilio Navaira (entre otros). Ya he mencionado antes que nos gusta cambiar la versión de Ella es así. Lo que más me gusta cuando empieza diciendo "llega mi madre a mi casa, me pregunta quién es esa borracha". Jaja. Luego cuando dice "... lo más bonito es que le atora, como mi padre le atora al six, ella es así. Los domingos siempre se alcoholiza por eso Dios ilumina su sonrisa".

Llegué a la conclusión de que debería buscarla.

A manera de cierre pondré la liga para una bonita canción que se llama me importa madre (aviso, por si acaso, que es texana). Esa es la rola adecuada para los metiches, creo, después de todo, ¿no? Mi versión sería así: me impoorta madre que me aconsejes o no)

(Por me importa madre empecé me di cuenta que extraño al grupo que tocaba música norteña/texana en el sabino. ¿Habrá videos en youtube del sabino?).

Hielo negro

Me emocionó encontrarla en la librería. No sé porqué. Pregunté por ella y la chava tuvo que buscarla. En lo que ella la buscaba en la computadora la encontré. Me emocionó, como ya dije. La vi y, ni lo pensé, me dirigí a la caja. Los colores me agradan porque tiene los del Peñarol. No hay relación entre una y otra cosa está claro, pero los colores negro y amarillo me fascinaron...

Apenas empecé a leerla pero me va gustando.

La verdad es que esto ha sido lo único bueno que me ha pasado en la semana, francamente.

miércoles, 25 de mayo de 2011

Finalmente

Finalmente terminé un libro de los que empecé en semana santa. Terminé una novela que se llama About a boy de Nick Hornby.

martes, 24 de mayo de 2011

Poco a poco

Poco a poco ha ido disminuyendo el dolor en el cuello. Eso está chido. Lo malo es que vuelve a ser miércoles y me siento estresado.

Últimamente me pasa algo muy curioso. Lo mejor que me pasa en el día son los momentos que estoy dando clase (excepto la clase del doctorado. No sé porqué la estoy sufriendo). Afuera del salón me he sentido fuera de lugar, muy incómodo...

domingo, 22 de mayo de 2011

Tristeza

Como a eso de las 2 am nos dejaron de vender pisto en el antro al que suelo ir los sábados. A diferencia del anterior sábado es que abruptamente dejaron de poner música. Algo sucedió con el sonido dijeron. Fue eso o de plano nos corrieron. El mal pedo es que antes de las dos me fueron a decir que si quería pedir algo más porque cerrarían la barra. Pedí un litro (de tequila y toronja pero sin la sal pinche que le ponen afuera) y aparte me quedaba una cheve. Me dolía la cabeza y pasé una noche con cierta angustia porque descubrí que traigo inflamada una parte del cuello (entre el cuello y el hombro. Cerca de la yugular. Hace algunos años se me inflamó pero del lado derecho. Fue muy doloroso. Por la particularidad de la zona nadie quiso operar y el tratamiento fue largo. ¿Será sólo un dolor muscular y ya? Ojalá.

Terminé la tarea del litro pero no la de la cerveza. Nos salimos con la intención de ir al café. Al café. No tenía idea de lo que había pasado. Me pareció anormal pasar por ahí y que todo estuviera cerrado. Podía estar cerrado pero no se oía música. La pizzaguana también estaban cerrada. Me llamó la atención pero no sabíamos nada. ¿No debería de haber estado cerrada la calle?

Me enteré varias horas después de lo que pasó. Es triste. Muy triste.

En fin.

viernes, 20 de mayo de 2011

El fin

Me voy enterando que hay quienes dicen que mañana es el fin del mundo. ¿El fin de lo que llamamos mundo? Pero eso no es lo que más me importa, no. Quizá sea un poco egoísta. A mi lo que me interesa es saber a qué hora sucederá eso. ¿Será temprano o muy tarde? ¿Para qué quiero saber? ¡Pues para darle la bienvenida al fin con unas cheves! A la muerte le invitaría un caguamón. Ándale, el último caguamón y nos vamos- le diría. ¿Querrá? Bueno si nos cargará la chingada que al menos nos den la oportunidad de la última voluntad, ¿no? Yo no me voy si no me tomo unas caguamas con la muerte. O mejor un barril para cada uno y un cabrito en salsa como botana (¡¿botana?!).

O con quien sea que venga.

A lo mejor el apocalipsis llega con un terremoto o un huracán o la combinación de ambos. Entonces si eso pasa prometo que me encontrará con mis envases bien abrazados, la hielera llena con mucho hielo por si se ofrece. Todos dicen que no te llevaras nada pero quién sabe, a lo mejor te dejan partir con un six de tecates (o de caguamas) para el camino... ¿será un camino muy largo? Me imagine caminando detrás de una fila muy larga de personas y de repente, suena el ruido característico cuando abres una lata de cerveza... inevitablemente voltearían a ver al cabrón que tuvo la ocurrencia de llevarse unas camineras. Preferiría que fueran caguamas pero unos botes no estarían mal. ¿Me fastidiarían por eso? Mi condena sería tener la cheve ahí, verla bien helada, en su punto pero no poderla abrir. Pero, ¿y sí nadie da instrucciones para saber qué hacer en los apocalipsis porque me condenarían por abrir una cheve del otro lado? Llevaría mi caso a la suprema corte, de verdad. Condenado por una cheve. Esas serían mamadas.

Dios no podría permitir semejante arbitrariedad, ¿o sí?

jueves, 19 de mayo de 2011

El retorno al café del mesero cantante II

¿Por qué me habla en inglés? Vine con la intención de contestar correos, de revisar las tareas que me enviaron mis alumnos de la clase que no di -ayer- pero en el café la conexión es "limitada o nula". El mesero me pregunta en inglés que qué chingados quiero. Ya me conoce -creo- pero afortunadamente aún no me trae el café en automático. No canto victoria -aún puede hacerlo- pero hoy no está cantando. Por lo pronto su versión de Luis Miguel, Enrique Iglesias u OV7 no me está molestando. Supongo que al seguir viniendo, de vez en cuando, demuestro que si soy -al menos un poco- masoquista.

Como no tengo red me puse a releer un cuento y descubrí que tengo un error temporal. Digo que por un penalti atajado por un portero de Tigres (a Misael Espinosa) llegué al River del Enzo, Salas y compañía. Tal vez por la época en la que hablo del disparo mal colocado por Misael, en River el entrenador era Passarella o tal vez Merlo. O quizá fue un poco antes de ellos. Hay como siete años entre una cosa y otra.

Antes de ponerme a releer, me quedé con la mirada perdida así como a veces me quedaba en el vips. Mientras veía sin ver (a nadie en particular) me acordé del Dr. Muñoz. Me pregunté otra vez cómo me vería si me dejara la barba como él. Me vería muy raro o chistoso. Me acordé de cuando mi problema era sumar variables aleatorias independientes usando el teorema de convolución. Ahora, ¿la paso mejor o peor? Siempre que ponen el café en la sala de maestros recuerdo el olor del café del cet. Creo que ya ni existe ese centro. En la sala de maestros como estoy en la mera entrada me cuesta trabajo quedarme viendo -sin ver-hacia cualquier lugar que no sea frente a mi silla.

Me acordé de cuando decía que iba a estudiar mecánica cuántica y él (Dr. Muñoz) opinaba que acabaría estudiando partículas.

II
Hace un año -¿o dos?- fui al concierto de Joaquín Sabina. Llegó contento porque el Atlético de Madrid acababa de ganar su primera copa internacional. Me acordé porque ayer la ganó el Porto. Fue un concierto muy emotivo. Me conmovió vaya usted a saber porqué. ¿Es normal sentirse así en un concierto de Joaquín Sabina?

III
Compré un libro que tiene por título Una cerveza de nombre derrota. No tengo idea de qué trata pero me llama la atención el nombre.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Cosas que pasan n +1

¿Cuántas entradas habré escrito con este título? ¿En cuántas entradas habré escrito no dormí bien o que dormí poco? ¿En cuántas entradas habré escrito que estoy bajo presión? Tal vez, realmente lo deseo, es que mi estrés sea injustificado y no salgan las cosas mal.

No está chido.

lunes, 16 de mayo de 2011

Cosas que pasan

Este fin de semana estuvo muy desangelado. Después del exceso, creo, de diversión en el último mes supongo que ya me tocaba un fin de semana "tranquilo". El lugar al que suelo ir sacó la onda de que cerraría a las 2am. En mi opinión hay más riesgo a las 2am que a las 4 o 5am. Pero ellos son los que saben quiero pensar...

Como no tenía ganas de irme a mi cantón le seguí en otra parte. Está raro ese tema de la seguridad porque lo único que provocan es que acabemos yendo a lugares que realmente son peligrosos. El caso es que me tocó una larga discusión con una que dijo llamarse Jimena. No podía creer que fuera camarada de dos mujeres tan diferentes como Xiara y Katherine. Habló mucho y la neta no seguí mucho la conversación aunque, tampoco quería que se fuera.

En fin.

lunes, 9 de mayo de 2011

De regreso/Sueño 02-11

Después de este breve receso vacacional (y sin sueldo que es lo gacho del asunto) ya estamos de regreso en la escuela. Fue un periodo divertido creo. Los últimos dos jueves y sábados me los pasé bien chingón. Una amiga, la de las palomitas especiales, me dijo el sábado: ¿qué hicimos que el viernes me estuvo doliendo todo el cuerpo? Si yo fuera ella no olvidaría tan fácil que le hicieron una quebradora, ¿o ustedes sí? Le dije eso y se quedó pensando un rato. Al parecer si se le pasaron las cheves. Su duda era: ¿eso que sentí el viernes fue cruda? Recuerdo todo esto porque ahora el que anda adolorido y jodido soy yo! Increíble. Ayer me sentí realmente mal. ¿Nos estarán vendiendo pisto adulterado? ¡Fueron los hielos! (¿los hielos con los que enfrían la cheve o cuáles?)

Descansar lo que se llama descansar no pude pero al menos me divertí.

Sueño 02-11

Ayer como ya dije me estuve sintiendo mal casi todo el día. Me aliviané muy tarde y luego no me podía dormir. Creo, no sé si sea así, que dormí una media hora. Cuando mucho habré dormido una hora. Ese rato que dormí para colmo soñé que se me hacía tarde. Se supone que llegaba como dos horas tarde. Llegaba bien para mi segunda clase pero para la primera no. Mientras se llegaba la hora de la clase me entretenía en una muestra gastronómica. Todo iba bien excepto por el momento en me servían un plato para comer. Me llenaban el plato una y otra vez. Me levantaba para irme a clase y resultaba que había muchos pasillos. Era algo así como la escuela de los pasillos que se bifurcan. No di con la salida o modo de llegar a mi salón porque volví a faltar (¡y era apenas el primer día!). Lo que si pude hacer, o tal vez los pasillos conducían al mismo lugar inicial, fue regresar a la muestra. Ahí alguien se acercó a saludarme y me dio una copa de vino blanco, la cual acepté de buena gana, porque ya no llegaba a clase. (conste que nada más por eso).

Estaba muy bueno el vino pero me despertó la angustia de haber faltado el primer día a dos clases.

Después ya no pude dormir.

sábado, 7 de mayo de 2011

Palomitas especiales

Normalmente cuando pedimos cheves nos llevan palomitas. Casi siempre las dejo pero ella suele pedir varias veces que le lleven más. Siempre nos culpa a los demás que nos las terminamos pero realmente es ella la que arrasa con las palomitas. El pretexto es que así le sabe mejor la cerveza. ¿Será? (Realmente es un mero pretexto porque cuando toma agua igual arrasa con las palomitas)

El caso es el jueves se repitió la misma historia. Sin embargo, se me ocurrió decirle que esas palomitas eran especiales. Eran especiales y se las había mandado un admirador. Para hacer más creíble (?) el asunto pensé que era buena idea escribirle en una servilleta "Especialmente para (aquí va el nombre de la chava pero lo omitiré)". Al principio me dijo "ya, no estés jugando". Puse la cara más seria que pude, a esa hora y con cheves encima fue difícil, y le dije que era en serio que un tipo mamado bien acá se las había llevado (¿cómo son los bien acá?) había ido a dejarle las palomitas (hablando en serio, ¿a quién se le puede ocurrir que podría quedar bien con palomitas?). Cabe mencionar que la mayoría de los que van los jueves son motociclistas, o andan en esa onda, así que no tenía que añadir más detalles a la descripción. Además considero algo particularmente complicado el describir las características de una persona...

Al principio no me creyó pero luego le fue dando curiosidad o no sé pero me preguntó varias veces que quién había sido. Le preguntó incluso a los meseros (chale). Luego de una larga reflexión volvió a convencerse que tuve que haber sido yo. Lo negué muchas veces. Luego descubrió que traía pluma (¡y era del mismo color!). Pero claro, el bato en cuestión me la pidió prestada. Además, le dije que no podía haber sido yo quien le escribió esa nota. No podía haber sido yo porque no le habían puesto acento a su nombre!! (¡como si tuviera buena ortografía!)

¡Lo que es no poner atención! ¡Escribí esa nota ahí delante de ella y ni cuenta se dio!

Fue muy divertido.

miércoles, 4 de mayo de 2011

...

I
Antier vi la parte final del Yanquis contra Detroit. El juego estuvo parejo hasta que lo rompieron los yanquis en la novena entrada. Los Tigres empataron a tres con dos jonrones y el juego se puso interesante. Fue divertido hasta eso. Me recordó el año, quizá del 84, en que los Tigres jugaron la serie mundial contra los Padres de San Diego. La serie fue para los Tigres y en el último partido si mal no me acuerdo hubo un batazo con "la casa llena". 1984 fue un año en el que oí varias frases misteriosas como por ejemplo: "fue un gol de pizarrón", "tiro de castigo", le "robaron la base", "carrera sucia" y "jonrón con casa llena". La frase más impactante y llena de misterio fue "una carrera de caballito". ¿Qué significaba que anotara una carrera de caballito? Ese interés por medio aprender el beisbol se debió sin ninguna duda a Fernando Valenzuela y a Teodoro Higuera.

Entonces, como decía, en el último partido de la serie oí que un bateador de los Tigres dio un jonrón con la casa llena. No entendí nada: ¿casa llena? ¡¿Dónde estaba la casa!? Sinceramente a mí me pareció que al no poder regresar la pelota los Padres los Tigres aprovecharon para anotar las veces que quisieron. ¿No era como el futbol en que se devuelve (bueno a veces) la pelota? No. Los aficionados culeros se quedaron con la pelota y después de semejante acción desleal no pude más que apagar la televisión. ¿Iban a jugar en serio o no? Ja. No sabía nada. Ahora sigo sin saber nada aunque más o menos sé de lo que hablan.

Al otro día, eso sí, conté bien indignado: ¿vieron el robo que le hicieron a los Padres? Jajaja. Me enteré ya muy adelantada la serie que en los Tigres jugaba un mexicano (Aurelio López) pero ya había elegido a los Padres como mi favorito (¿por qué sería?). Si mal no recuerdo el lanzador estrella de los Tigres era Jack Morris (¿le decían el gato?).

Fue mala idea irle a los Padres de San Diego. Fue casi tan inteligente como la vez que se me ocurrió irle a los Patriotas en lugar de los Osos de Chicago. Era la época de Mike Ditka (coach) y el refrigerador Perry. Bueno había uno al que le decían refrigerador. Era muy emocionante, ¿por qué?, cuando lo mandaban a avanzar una yarda o dos. ¿¡Quién detenía a semejante grandulón!? Tenían muchos jugadores que en ese año les fue bien pero yo me acuerdo ¡nada más del refrigerador!

Estaba Walter Payton claro. Pero es más fácil que me acuerde del refrigerador.

II
Comercial: Cuando el mundo se te haga lento: ¡pícale! (¿a qué?)

Ese fue el comercial de infinitum que estuvieron pasando por Fox Sports durante el medio tiempo de América Santos.

¿Y sí el internet se te hace lento? :s

Me sonó como el chiste que oí en radio hace tiempo. Una mamá para conseguir que hiciera la tarea y se durmiera temprano le dice "si no haces la tarea va a venir el vampiro y te va a chupar toda la sangre". El niño responde: "¿y sí hago toda la tarea qué me chupa?" Así el internet, lo contratas, ¿y qué pasa, a qué le picas, si la conexión es lenta?

III
He visto demasiado futbol últimamente. Hasta vi una parte del ¡América-Santos! Fue triste estar en el puentes porque cuando llegué nada más estaba otro cliente. Luego se fue y me quedé solo. Como quiera aguanté tres cheves más. Me salí cuando empezaba el segundo tiempo.

martes, 3 de mayo de 2011

Sobredosis

Por fin terminó el Barcelona-Real Madrid.