Cosas que pasan (y no son chidas)

Ando bien preocupado (¡los saben dicen que hay que ocuparse no preocuparse!) pues tengo dos grupos que no han respondido a ninguno de mis esfuerzos por que les vaya mejor. Es la primera vez que tengo un promedio tan gacho (tengo 54 en uno y en otro 58). Uno saca notas muy bajas y el otro nomás no entrega tareas. ¿Así cómo?

Concurso

El sábado hubo concurso de disfraces. Como soy bien aburrido no me disfracé. La música y las cheves eran suficiente para mi. Supongo que debe ser divertido pero el sólo hecho de tener que ponerme a pensar en eso (sobre el disfraz) me da una hueva tremenda. Me dieron ganas de invitar a mi camarada el coco para que vieran la trasformación terrorífica de mi cuate pero él, junto con B. Zaragoza, ya pistean por su lado. (De hecho hace poco me encontré a Zaragoza pisteando y corriendo detrás de una morra (la de las nalgas operadas... según B. Zaragoza las tiene. A mí no me consta). La verdad es que me dio hueva y mejor me fui a aplastar a un sillón. Fue un buen rato a pesar del espectáculo de mal gusto (ja) que se aventó el Zaragoza.

Lo chido después del concurso es que me invitaron unas tostadas.

Azotes

Tenía ganas de ir a escribir al bar donde trabaja mi amiga la de las rifas. No obstante, como hay partidos, seguramente habrá una buena cantidad de clientes. El problema no es ese realmente, el problema es que no hay lugares suficientes para estacionarse.

Pero tenía (tengo) ganas de escribir. Necesito ponerme a pensar sobre esto, tema al que no le he dedicado demasiado tiempo. Siempre que pasa algo así recuerdo a la maestra de química cuando nos decía que la química era como una novia celosa, si te distraías ella se desquitaba perdiéndole el hilo de lo que estabas estudiando. El resultado en el parcial, según la maestra, no iba a ser tan bueno… Así me imagino a las partículas escalares, quienes a las distancia me ven celosas, por no ponerles la atención que requieren. La primera consecuencia es que estoy realmente oxidado, lo cual es triste. Muy triste.

Entonces, como probablemente no vaya al lugar donde puedo saludar a mi amiga la de las rifas, previo al inicio de una clase me puse a escribir (así bien rebelde yo). Ya me hacía falta. Últimamente me parece que todo va con retraso en mi camino. Quiero correr/volar pero no puedo. Aparte mis rodillas, chale, no me lo permiten. Aunque por supuesto no hablo de ese tipo de camino ni de ese caminar/volar. Chale.

En este ratito, mientras espero que regrese mi grupo completo, después de un descanso que yo no di, me puse a pensar qué fue o qué es lo que me motiva a estudiar algo así, y no puedo dejar de pensar que es puro masoquismo. El caso es sufrir.

Finalmente

Finalmente si fui al concierto de Guns & Roses. Estuvo bien aunque hubo un par de inconvenientes: el primero batallé mucho para ponerme de acuerdo con A., el segundo a Guns se le ocurrió salir a cantar hasta las 00:30 y el concierto terminó cerca de las 3:30am.

A medio concierto de repente me empecé a sentir mal (pura gastritis quiero pensar) y aparte traía sueño... Esto último también califica como inconveniente, creo.

Me voy a clase (pasaré coraje porque el examen estaba para cien... ¿sino sacan cien en un examen como ése entonces en cuál?)

Cheve con espuma

Volví al lugar donde trabaja mi amiga la de las rifas. Estuve un ratito nada más. La cerveza resultó ser mala consejera. ¿Alguna vez da buenos consejos? No sé. El caso es que me quedé un ratito y decidí salirme un poquito después que a los Cardenales de San Luis se les empezó a hacer bolas el engrudo. Iban ganando y los Rangers le dieron la vuelta. Los dejé 2-1. Me parece que pensó uno de los meseros que nada más había ido a cenar... sí pero también quería pistear pero decidí mejor irme al lugar que me gusta ir los sábados.

Antes de salirme hice un experimento casi científico.Volví principalmente porque quería repetir la experiencia de la bohemia sin espuma. Para esto debía sentarme -según yo- en la misma mesa para tener las mismas -o casi- condiciones. Encontré una respuesta inesperada (ja) sí hace espuma... y lo más extraordinario es que el resultado nos sugiere que la espuma sí depende de quién la sirve porque, por ejemplo, como mi amiga la de las rifas andaba ocupada la serví yo sin poner demasiado cuidado al asunto y se formó la espuma... Realmente, lo confieso aquí, después de haber servido la bohemia quise más a mi amiga la de las cheves porque no sólo es bonita (está guapetona), divertida (a veces) sino que además sirve cervezas con maestría!!

Me salí contento -no por la espuma claro- por el experimento. Tendré que repetirlo y le pediré a ella que vuelva a servirla para ver si todas las veces consigue evitar la espuma...

Seguiremos informando.

El Falso Catenaccio y el Pasto Sagrado del Electric Fields (borrador)

Me pone de mal humor poner exámenes. Es chistoso porque no los presento yo (¡pero si los reviso!). Todo lo que pasa me pone de malas. Por ejemplo, "no traigo formulario" o le "puedo preguntar", "es que no entiendo la redacción", etc., etc. Claro hay ocasiones que me parece que todo lo que sucede es divertidísimo. Incluso tengo una paciencia casi infinita, inagotable. Aunque por supuesto, depende mucho de cómo pregunten...

Pero hoy estoy de buen humor. Incluso contesté un par de cosas obvias -según yo-. Llegué alegre porque en el camino del "vestidor" (la sala de maestros) a la cancha me venía riendo del que hizo el examen –del estratega-. Según él el examen estaría bien difícil, que sería el equivalente, a jugar al catenaccio, que sólo un Messi podría abrir semejante cerrojo (o candado); y que sí era(n) lo suficientemente hábiles para sacarse la marca de encima, atrás los iba a esperar uno tan suavecito como Gattuso. No van ni a respirar, me dijo.

La causa de mi risa fue que realmente el examen no estaba complicado. Al principio me molestó porque cómo está eso que jugando de local juegue como visitante, ¿qué le pasa? Estando así las cosas llegué a la cancha donde fuimos recibidos por una hinchada que cantaba y gritaba emocionada –la verdad es que estaba vacía pero sí ustedes no le dicen a nadie yo tampoco-. Los aficionados sacaron los tubos de rayos catódicos haciendo que las tribunas se vieran espectaculares – en el electric fields los tubos de rayos catódicos hacen las veces de bengalas-.
Uno de los cantos más conmovedores y emocionantes que oí fue:

Vamooos Vamooos equipo que esta tarde tenemos que ganar
Vamooos Vamooos equipo que esta tarde tenemos que ganar
Vamooos Vamoos equipoooo pongamos hueeeevoooo
Que en esta canchaaaaa
Queremos verte campeeeón
Vamooo pongamos hueevo
Y apliquemos la ley de gauss…
(confieso que no hubo mucha imaginación pero a coro se oía muy bien).

Y en eso arrancó el partido. Empezó como se lo imaginaba el DT, los locales tirados atrás reventando, pegándole al rival y los contrarios confundidos. El DT sonreía. Regresó de la zona técnica nada más para decirme y a ti qué importa el espectáculo, ellos cantan igual. Cuando le pregunté qué iba a hacer cuando los silbaran a lo que contestó –imitando a Passarella- “no importa, ellos podrán ser cincuenta mil pero en la cancha mando yo”. Sin embargo, se molestó cuando le conté que me parecía que sería como uno de esos visitantes que juegan a cuidarse pero que luego les tiraban por todos lados; y sí, apenas a los cinco minutos en una jugada rápida un delantero contrario se puso delante de la portería. Sacó al portero pero el disparo salió desviado… uyyyy se oyó el suspiro de alivio de las tribunas del electric fields. El portero, me llamó la atención, se levantó aplaudiendo y gritando “¡así así, con huevos!”. ¿Con huevos qué? Estaba emocionado como si hubiera sido por él que el marcador siguiera cero cero. Pero no. Se les vino la noche ante la llegada continua del rival. Seguimos cero a cero pero no por mérito del equipo local sino por la mala puntería –o calidad- del rival.

El partido se rompió cuando un rival azotó un examen en el piso. El público se levantó de su asiento (los que aún no estaban de pie) a reclamar la grosería. El árbitro sancionó la majadería con una descarga eléctrica que provocó la protesta de todo el otro equipo. La protesta fue airada. Mientras más protestaban más corría el tiempo y más jugaban a favor del deseo del DT. Casi al final del partido los locales, en un descuido, marcaron el gol de la diferencia. Casi inmediatamente después se me cayó la pluma pero el árbitro no marcó igual que la anterior jugada. Hubo más protestas y uno de ellos salió repelido de la cancha. Un rato después en entrevista le confesé a un reportero que me agaché con miedo, por la descarga, pero que al final de cuentas yo no influyo en el marcador, aunque no dejó de señalar que el árbitro había inclinado la cancha y había sido localista.

El DT salió contento y sonriente del campo. Mencionó que el exquisito arte del catenaccio no lo puede disfrutar cualquiera. Se enojó y dejó la conferencia de prensa cuando le comentaron que le habían tirado a gol no menos de diez veces.

Si te maldigo que gano... (Hoy es "de vez en cuando")

1. Descubrí dos versiones de la canción (la que dice "cantinas muchas cantinas") que se llama "que me lleve el diablo". Hay una de los bravos del norte y hay otra de los huracanes.

2. Hoy (ayer) si vino mi amiga la de las rifas. Le conté que la extrañé el lunes. Le platiqué precisamente cuando se acercó a venderme el número perdedor -de la noche- que la eché de menos. Su respuesta fue "ay, es que los lunes no vengo". Lo chistoso es que mientras escribía la anécdota con ella llegó el vato de las joyas, que como ya dije el otro día, ahora toma sol... que es casi lo mismo.

3. Entonces me dijo, la de las rifas, "ay, pero hoy sí vine". Hasta mucho después pensé que tal vez era el pretexto que ocupaba para decirle "venga un abrazo". Lástima que se me ocurrió luego de un rato.

4. Si me hubiera preguntado el motivo de porqué la extrañaba le hubiera contestado que nadie me vende un número perdedor tan bonito como ella... jaja chale.

5. Me invitó a comprarle un número, como siempre. Le recordé que siempre perdía pero ella me corrigió que sí había ganado. Le dije que muy de vez en cuando ganaba y ella me contestó: ¡por eso, hoy es de vez en cuando! ¡Ya te toca! Pero de tocarme nada...

6. Lo único que me tocó bueno, digamos, durante el día fueron unas bohemias que pedí ya al último. Me encanta el cambio de sabor de la cerveza que sabe a agua (tecate) con la bohemia.

7. Me sentí abandonado otra vez -pero no en una esquina... lo cual no sé si sea bueno o malo- porque el vato de las joyas les estuvo tomando fotos durante un rato a las chavas. A Lili, a una que me cae muy bien pero que no sé como se llama y a mi amiga la de las rifas.

8. Me serví parte de la primera bohemia y lo que quedaba me lo sirvió mi amiga la de las rifas. Me contó que no sabía servir cerveza (¿no se sirve en el vaso y ya?). En mi opinión ninguna la sirve como ella, hasta se ve sexy (¿se veía sexy porque traía una cerveza en la mano o porque de veras me lo parece? Misterio).

9. Su duda consiste en que para algunos es molesto que se forme espuma y dice que otros les gusta (a esos vatos les gusta las malteadas). A mi me pareció perfecto porque no hizo espuma... luego me quedé con la duda de si la bohemia -oscura-la hace o no.

10. Por mera curiosidad científica me compraré unas bohemias hoy en la noche (por pura curiosidad nada más) y realizaré varios experimentos.

Red

Últimamente he tenido muchos problemas con la red. O anda muy lenta o de plano no funciona. Lo malo es que las fechas límites o trámites que hay que hacer no cambian aunque esté el cagadero...

En fin.

¿Y mi amiga la de las rifas?

Es (era) lunes. Tal vez por eso no está. Chale. ¿Chale qué? Siempre me quejo que me quiere vender un número para cualquier cosa pero hoy.... pero hoy tenía (tengo) ganas de verla. Otra vez chale.

Vine (fui) porque el día ha estado muy jodido pensaba, pretendía, que podría arreglar de algún modo -con un mucho de complicidad de afuera- sin embargo las cosas siguen igual. Dicen los que saben que eso no pasa pero uno nunca sabe.... ¿ y si hoy si pegaba el chicle?

Hay otra que me cae muy bien (o re.bien lo escribo así para acordarme de A.P.) pero me tocó lejos (¡como a dos mesas de aquí!).

Lástima.

Es por ti

El sábado oí esta canción de inspector y se me antojó oirla en el antrópolis, qué triste que ya no se pueda.

Puentes como liebres

1. Murió Granados Chapa... ¿y ahora quién ocupará su espacio? Hace no mucho contaba aquí que me siento abandonado por algunas mentes ilustres...

2. Debo confesar que no pude. El insconsciente, o como se llame, volvió a traicionarme y no sólo eso: se burla de mi. Volví a soñar con ella, aunque ahora la veía más fea que de costumbre... ¿y sí siempre estuvo así pero yo la veía hermosa?

3. El sábado fui a la feria del libro con la única intención de ir la presentación de la novela Hielo negro de Bef y visitar el estand de Almadía. Luego de la presentación, como quedó algo de tiempo, me lancé a Alfaguara para preguntar si tenían la novela gráfica Espiral (también de Bef). La encontré pero mientras la buscaba -y un poco antes de darme por vencido y preguntar por ella- me topé con un libro de cuentos de Benedetti que lleva por título Puentes como liebres. Lo tomé más por... no sé, bueno me gustan los versos de Pedro Salinas que cita al inicio, y aquí lo pongo:

"Iremos, yo, tus ojos y yo, mientras descansas, bajo los tersos párpados vacíos a cazar puentes, puentes como liebres, por los campos del tiempo que vivimos". Pedro Salinas

La verdad nunca he dado con el texto, poema, completo de Salinas. Tampoco lo he buscado mucho, pero me gustan esas líneas. Esos versos dicen mucho de lo que trata el cuento (Puentes como liebres). Me recuerda mucho a la Deep in a dream of you, o más bien me recuerdan esa época. No sé si por la caída tan ojete que pasé en esos años sea que ahora no puedo volver a leer a Benedetti. Es algo muy raro. Es eso, o lo leí tanto que terminé harto... y ese es precisamente el punto: desconozco el motivo por el que siento repulsión por cualquier cosa relacionada con él. Aún así, a pesar de la repulsión, hojeé puentes como liebres sonriente por el recuerdo de aquellos momentos tristes que no quiero volver a vivir...

4. Oí por algunos minutos la narración de los Manrique del partido Monterrey-América y fue muy divertida.

5. Pepe Rojo me escribió una dedicatoria chida. Mencionó, en su dedicatoria, que me encontraría con refrigerados deprimidos y hasta con hello kitty jajaja. Son temas de sus cuentos. Hubiera estado crema que también me mencionara a Paty Chapoy (¡una historia es sobre ella!).

6. De haber sabido que andaría Orfa Alarcón en la presentación de Hielo negro hubiera llevado Perra brava para que me la firmara... Chale. Me dio pena saludarla y decirle, confesarle, que no se me ocurrió pensar que iba a andar ahí.

Chin.

7. Terminé de leer Polvo de Benito Taibo. Es una de esas historias que no quería que terminaran...

8. No fui a la presentación de Elmer Mendoza. Eso no estuvo chido.

9. Volví a ver, de lejos, a la chava que soñé en la historia del león en la playa. No me animé a contarle que la soñé y apartir de entonces me cae bien (claro ella está bien preocupada)...

You only live once

Confieso que no soy muy de los Strokes pero de todos modos fui al concierto de anoche. Me la pasé muy bien... incómodo porque fui acompañado y como que no me acostumbro (qué mal).

Dudas

Creo que quiero correr antes de aprender a caminar. Siempre me pasa. En esta situación actual debería empezar por lo básico...

¿Qué haces? (Desde la esquina más abandonada del mundo)

Nunca me había agüitado aquí. Monterrey le ganó a Tecos (ahora Estudiantes) y saludé a un camarada. Me dijo ya sé, si te quiero buscar a dónde venir. Me sentí como si fuera mi nuevo vips. ¿A cuántos no dejé mal acostumbrados a que me buscaran ahí? ¿A cuántos no dejé de ver por eso? Claro no es lo mismo tomar diez tazas de café todos los días que diez cheves... fue una evolución, si acaso cabe la expresión, rara.

¿Por qué si me siento mejor que antes me siento igual que entonces? Aquí me da pena sacar una novela y ponerme a leer. Tal vez debería de haber ido a las jarras y luego al Brasil. Me sentiría en casa y más seguro. Bastaría con caminar al poison, creo, y tomar un taxi; pero, ¿y aquí? Nota: Creo haber distinguido a un taxista, afuera del poison, que antes me tiraba el paro de llevarme, cerca de donde vivía S., cuando veía un sábado sí y el otro también a Susan. (Se cambió el nombre de Wendy a Susan aunque el mal carácter no se lo cambió. Con cada cambio de nombre debería sufrir una transformación total, ¿no? En ese lugar nada más yo la conocía así que no había necesidad de cambiar (supongo). Le encantaba exagerar y contarle a todo el que se le acercaba que teníamos como diez años de conocernos. La verdad es que apenas tendríamos unos cuatro años...a lo mejor para ella era uno de esos casos en "parece que nos conocemos desde siempre").

Me vendieron esta pluma (que trae foco) y escribe más chido de lo que me imaginaba. Mientras escribo que me gusta la pluma pienso o siento que soy un fraude. ¿Cuándo o cómo comenzó todo? ¿Me voy caminando o tomo un taxi? Creo que debí comprarle las dos plumas al camarada, que en la esquina de 15 de mayo y Pino Suárez, me vendió esta pluma. Me gustó después de todo. Echo de menos el carro. Me imagino atravesando la ciudad para buscar a A. lo cual, como ya se sabe, es improbable. Bueno, hoy que no tengo-traigo el carro me muero de ganas por ir a buscarla, por ir a darle a beso (ja) o para decirle -disculpe A. pero le voy a dar un beso- Chale, qué jodido. Me recordó como siempre el disculpe la molestia que ya me estoy yendo...

Lo peor de todo es que ya me dieron ganas de agarrar el pedo. De pronto recordé al camarada que después de -diagmos- quince cheves decía "ahora sí, ya me dieron ganas de agarrar el pedo". Eso me daba risa porque daba a entender que todo el rato previo a su frase nos habíamos estado haciendo pendejos era como para broma ya estuvo bueno, ahora sí va en serio. Esas eran las peores porque pisteaba más rápido, pedía más mugrero y terminaba, bien sufrido yo, pisteando igual que él.

Mi amiga, la de las rifas, mientras escribo estas notas random llegó a preguntar "¿¡Qué haces!?" Lo de random fue para no sentirme tan out... Como de costumbre contesté que nada que sólo garabateaba con mi pluma nueva (y sí, me siento mucho). La verdad es que si no estuviera escribiendo nada no hubiera llenado una página tamaño oficio. Nota(una observación): Digamos que para estar completos con los que "usualmente veo aquí" ya llegó uno que siempre pide coca cola o joya de toronja. Alguna gracia debe tener porque siempre le hacen fiesta cuando llega (casi nunca consume nada). Perdón, hoy como para hacerme quedar mal, pidió una sol... aunque como ya se sabe es como tomar agua.

De repente me empecé a sentir en la esquina más abandonada del mundo. Claro, este bar, es el mundo -para mí al menos-. Es el lugar en donde están pasando las cosas. Se puso todo muy emocionante porque pusieron carreras de autos en la televisión y una canción que dice "cantinas muchas cantinas... si un día te fuiste de mí...y a mí que me lleve el diablo..." ¿Quién cantará esa canción? Me siento abandonado porque quiero más cheve y no veo a quién pedírsela. No veo ni a mi amiga la de las rifas.

Lo único bueno, mientras esperaba, que se asomara alguna chava para pedir cheve, es que llegó un mesero con botana sin haberme preguntado si quería... eso sí estuvo chido.

Nota 1:
Luego me fui caminando cantando (es un decir porque yo no canto ni aunque me paguen) "cantinas muchas cantinas..." Me asustó una pareja que andaba bien feliz en moto por el parque que queda camino a mi casa. Ellos andaban en su onda y yo en la mía pero fue muy inesperado encontrarlos ahí en moto.
Nota 2:
Hace mucho tiempo no escribía tanto en una hoja de papel.
Nota 3:
La chava que me tocó, la mesera pues, me dijo después de decirle que me tenía abandonado que no se quería acercar que porque me veía muy concentrado... si es para preguntar si quiero más cheve, ¡no es interrupción!
Nota 4:
Dormí muy bien y la clase del sábado me salió chida. No me entendieron nada pero me fue bien... jaja, no, le batallaron pero creo que sí me entendieron.
Nota 5:
La esquina más abandonada del mundo... Es curioso que puedan pasar muchas cosas pero la única inaceptable es que me ignoren en un bar. Pinches prioridades, ¿no?

Jueves

No salí como los anteriores jueves. Acompañé a A hasta las últimas consecuencias y con esto quiero decir que me quedé hasta que nos corrieron a pesar de la mi hora de entrada los viernes. Hoy, ayer, no salí como ya dije pero como quiera me estoy desvelando como sino anduviera cansado...

El punto es que me puse a ver videos en youtube acompañado por unas cheves. Aquí no hubo bikers pero tampoco estuvo A. No oí la música que normalmente ponen los jueves. Cambié el ritmo y empecé con Delgadillo. Para no hacer la historia larga, y terminar diciendo que sí extrañé a A, diré que di por fin con una canción que me gustaba mucho (en las noches de insomnio del 2001-2003):



También di con esta canción que me gusta:


Ya son casi las 3am y quiero otra cerveza :/

Sueño 13-11

A veces me gustaría ser más creativo en mis sueños. Preferiría soñar con personas diferentes o qué se yo. Ayer por ejemplo soñé con la misma chava de siempre. Ya es aburrido. Alguna vez, durante la historia, reaccionaba como volteándome a ver para preguntarme si no era capaz de soñar con alguien más... Parece que no. El caso es que la vi ahí sentada con su novio o lo que sea y pensé o me acordé de la canción de los Fabulosos Cadillacs. Me acerqué a saludar con cara de fastidio porque más que estar harto de verla con otros estoy harto de verla a cada rato en sueños... La saludé y le di un beso, su amigo novio o esposo se sorprende, y les digo a ambos "descuiden es el último es el último. Es más ni siquiera quiero saber cómo estás..."

Entonces, bueno, no me quedó más remedio que despertar botado de la risa, ¿el último? ¿De verdad ya no volveré a soñarla?

Descanse en paz

No era (soy) muy fan de este señor (Steve Jobs) pero le reconozco que fue muy chingón. Aquí pongo un emotivo discurso que dio en Stanford:

La difícil vida de una función (borrador)

Historia (borrador) para mesa 21.

Fin de semana

Fue un fin de semana muy movido en el que casi todo había salido bien... todo iba bien hasta ayer en la mañana que le pegaron al carro (estando estacionado). No tengo la culpa pero lo molesto es que me cambia los planes para semana (y tal vez parte de la próxima).

Nota (seguramente no viene al caso):
Me gusta que a esta hora la sala de maestros esté tranquila pero y aunque hay pocas personas les ha dado por estar entrando y saliendo y... no me cae muy bien :(

Monólogo

Hace algunos años, cuando empecé el doctorado, casi no podía dormir ni respirar. En esa época convivía con fumadores y no sentía el humo (no mucho vaya). Percibía el olor en la ropa pero mientras fumaban no me molestaba gran cosa. Por aquella época (2001) solían poner, en la noche, en una estación de radio el disco (concierto en Madrid) Mano a Mano de Silvio y de L.E. Aute. Las primeras canciones (me refiero a De alguna manera, Las cuatro y diez, el monólogo y ¿qué hago ahora contigo? (también es conocida como ¿Dónde pongo lo hallado?) me pegaban mucho. No es que las demás no me gustaran (¿a quién no le gusta la del unicornio azul o la ojalá o a la masa, etc.?) me recordaban mucho a una amiga que me gustaba decirle Deep in a dream of you (a propósito de un cuento de Alfredo Bryce Echenique). Algunas noches sentía que desvariaba (tal vez si me daba calentura) y... luego estas canciones...

Aquí va la del monólogo:

Cosas que pasan

¿Es una novedad decir que extraño el sabino gordo? Ya no iba pero... no sé de repente me acuerdo de como se prendían algunos con rolas como ésta (confieso que me enteré porque yo puse esa canción... deveras) o la de gigantes... O las de la sonora que tocaba del otro lado canciones como la del viejo del sombrerón.

Personalmente prefiero la de la cadenita -pero a esa hora (¿cuál?) ya pisteado da igual-.