sábado, 4 de julio de 2009

La peste (ando fastidiado por la ley seca)

Tenía miedo de tener que leer todo el último día y que además estuviera tan aburrido como Marianela de Pérez Galdós. Creo que esa ha sido la única vez que tuve que leer algo a huevo y que fue casi una tortura... Supongo que haber visto la película en la que Rocío Dúrcal sale de Marienela antes no me ayudó tampoco. El caso es que tenía miedo de leer tantas páginas (no son muchas en realidad) y que la novela no estuviera... ¿chida? (yo tenía trece o catorce años tengan piedad de mi juicio de entonces... quizá lo discutible sea que lo mantengo sin darle oportunidad alguna a Pérez Galdós de reivindicarse... claro eso le debe de preocupar mucho a un muerto ¿no?)

La lectura de la peste fue peor que la de marienela. Fue peor pero porque fue hasta ayer que me puse a leerla (no un día antes como la otra). La historia me gustó aunque no la terminé de leer pues entre clases qué tanto podía avanzar aparte no tenía el libro y eso me limitó todavía más (siempre pude haberla imprimido pero no lo hice... De todos modos llegué a la mitad de la novela y eso me permitió poder hablar un poco en la reunión del club de lectura. La reunión estuvo muy entretenida también. Lo único malo es que me dieron ganas de tomar y me cerraron todo. (eso de hablar poco quizá lo hubiera hecho igual aunque la hubiera terminado... al final terminé contando mi anécdota de la plaga de cucarachas!! De veras)

Mis alumnos me sugirieron que me lanzara saliendo de clase al heb para comprar las cosas necesarias (uno me sugirió tres 24!! ¿Me vería muy necesitado? Misterio... Lo que si puedo decir es que me enorgullece haberle puesto 100 a ese cabrón. Mira que sugerirme que me compre tres 24... jaja) pero tampoco me alcanzó el tiempo para eso pues tuve que hacer varias cosas antes.

Otra cosa que no me parece chida es que al parecer el antro al que he estado yendo últimamente abrirá hoy pero harán un concurso para saber quién canta y baila como Michael Jackson. Ese pedo en 1988 me hubiera entusiasmado pero ahorita me parece aburridísimo... A lo mejor no lo es y el morbo de ver cómo se disfrazan otros sea los suficientemente interesante, pero oir las rolas de ese cabrón me... bueno sucede que quedé harto de su música. Me sucedió lo mismo con Benedetti, no es igual claro, a quién leí tanto que quedé hasta la madre y ahora no quiero saber nada de ellos... ¿será normal?

De repente me sentí como la tortuga, en una lectura de los libros de primaria, que invitaron a una fiesta y que se tardó años en subir una escalera. Al llegar arriba se resbala y cae... cuando se levanta se dice a si misma "malditas prisas la próxima vez caminaré más despacio"... No sé porque pero, quizá porque me siento acelerado pero al mismo tiempo me siento cansado, no he comido y aparte ando fastidiado porque el doctor me dijo que lo buscara el viernes pero no estuvo!! Y por eso no compré nada para este fin de semana!! Chingado. La tortuga creo que no venía al caso pero... (bueno Maradona cuando quiere decir que la cagas dice se te escapó la tortuga... sonó como si fuera mi cuate el Maradooo pero no, eso dice de repente... creo que a quién se le escapa la tortuga es a él pero nadie se atreve a decirle nada) El punto es que me acordé de la lectura.

Supongo que este es el momento en que debería decidir en borrar la entrada o decir que ésta no tiene propósito alguno (la que escribí anoche tampoco pero no la he borrado). Quizá debería de salir a buscar algún bar abierto al que le valga madre una posible multa y ya dejarme de mamadas.

En fin.

No tengo ganas de ir a votar mañana. Nunca me había pasado... pero creo que no hay a quién irle.

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