jueves, 20 de agosto de 2009

Extraña forma de vida III (última parte espero)/Sueño 16

Terminé la lectura de Extraña forma de vida. La verdad es que no me gustó el final. Quizá era previsible pero todo el tiempo estuve pensando que no, que terminaría diferente y bien chingón. Pero no. Lo mejor es cuando comienza a desarrollar su teoría acerca de los espías y cuando decide que cambiará su estilo narrativo (estaba escribiendo una novela realista y decidió no continuarla y dejar de ser realista).

Me pareció divertida.

Sueño 16 (o mi momento "Roger")

Al personaje al que más había que tenerle miedo (según yo) en la parte final de la novela del señor de las moscas es a Roger. El tipo fue subiendo su nivel de violencia. No sentía culpa. Mataba porque sí. En mi sueño mezclé un poco la violencia de Roger con algo que contó un camarada el sábado. Se supone que iba caminando, en mi sueño, por Río Panuco y de repente de una camioneta se baja empistolado un tipo. Me gritaba pero no le entendía que decía. No me dio miedo, al contrario le grité "estás pendejo o qué". El otro se sacó de onda y antes de que me dijera algo yo seguí gritando. Le preguntaba si no sabía quién era yo. Cuando me iba a decir que no yo seguí gritando: "-Dispara cabrón, no quiero que digan que te maté sin que metieras las manos. ¡Dispara!" En ese punto el vato ya no sabía qué hacer! El que se quedó arriba de la camioneta le gritaba "¡vamonos!" Pero él no podía porque lo tenía pegado a la camioneta. En eso de casualidad pasaron dos camionetas una en cada sentido y le dije "-mira wey ya te cargó la verga ahí vienen mis camaradas y vamos a matar a toda tu familia por andar de bravucón". En lo que voltea movió la pistola y en la distracción giró la cabeza hacia mí y le sacaba los ojos!! Cuando hice eso el otro wey abandonó a su camarada!

Le seguí gritando "¡dispara cabrón!" Mientras yo le daba patadas en los huevos. Le di varias hasta que me cansé... Luego recogí la pistola y seguí caminando. Tiré la pistola en el primer bote que me encontré y me desperté.

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