Me deje de mamadas y le dije que quiero que sea mi novia de
todos los dias. Eso de todos los dias es importante porque me conto que una vez un tipo le pidio que fuera su novia de los
viernes. Muy conveniente, creo. Se quedo seria pero me dio la impresion que no le desagrada del todo la idea. Cambiamos de tema quien sabe como, seguro estaba contandole una de esas historias poco prestigiosas pero divertidas (bueno ella se reia mucho... a lo mejor la risa era por lo de todos los dias), cuando de repente senti una palmada amistosa en la espalda. La sensacion que tuve fue que un cuate o camarada me habia visto y se habia acercado a saludar. Pero no. Era un vato que estaba en la mesa de al lado. Es conocido de mi amiga. Me saluda y me dice que ha visto que estoy yendo con frecuencia. Afirme, moviendo la cabeza, y antes que dijera algo me solto un "me da gusto que vengas. Sigue viniendo. En mi tienes a un amigo".
Minutos despues en un momento de euforia, de parte de mi nuevo amigo, levanto los brazos (el estaba con sus cuates) y empujo mi mesa. Chale. Derramo lo que me quedaba de cerveza y medio caballito de tequila... Eso no se le hace a los amigos, que cabron!
Nota 1: lo de "mi novia de todos los dias" se quedo en suspenso. Quien sabe. Al menos no me senti en la cancha del Maracana perdiendo con un tiro horrible* de Ghiggia...
*Lo de horrible lo pongo por la forma en que lo cuenta Rubem Fonseca.
Nota 2: Al salir del lugar nos encontramos dos retenes (¿se les llama retenes?). Justo estaban entre las calles del antro. Quiero pensar que por ir con mi no novia de todos los dias ayudo en algo. Luego, descubri que andaba pasada de copas, cuando les empezo a gritar gracias por cuidarnos! Bueno, puede ser que lo dijera en serio...
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