viernes, 23 de octubre de 2009

Las cosas que se pueden llegar a extrañar.../¿Conoces a Chuy?

Anoche mientras veía el partido que perdieron los Yanquis recordaba con nostalgia los buenos tiempos del embudo. Consideramos buenos tiempos a aquellos en los que había una guacara en el baño, las paredes tenían diferentes acabados (y no todas tenían) o estaban despintadas. El piso estaba quebrado y lo mejor era que de repente se levantaba un señor y gritaba "arriba las panochas". Ese grito se convirtió en una costumbre. Las veces que fuimos no faltaba quien gritara. El día que ninguno gritó nada sentimos la obligación moral de ser nosotros los que de repente dijeramos arriba las panochas. No me acuerdo si lo hicimos (sino me acuerdo es probable que no... que falta de moralidad la nuestra).

Ese lugar no tenía nada de especial pero desde el día que dejaron de gritar arriba las... comenzó a perder el feeling: pintaron las paredes, emparejaron el piso, mejoraron la iluminación, el moso (ellos solicitaban moso, no mozo) limpiaba la guacara, etc. Dejó de ser el embudo que nosotros conocimos y poco a poco empezamos a dejar de ir. La última vez que fui un señor me estuvo invitando a su mesa pero luego consiguió que dos se fueran con él (me daba risa porque volteaba como para decir mira no quisiste y ahora ya tengo dos!).

Lo más raro de todo es que nunca me animé a ir solo.

¿Conoces a Chuy?
Después de que terminó el partido me salí y caminé un tramo hasta donde estaba... bueno el caso es que caminé y de repente me saluda un señor. Me da la mano, me pregunta cómo estoy y luego me dice: ¿conoces a Chuy? ¿A Chuy? ¿Quién es Chuy? Bueno conozco varios Chuy pero... ¿a cuál te refieres? ¿No conoces a Chuy? Mientras me seguía preguntando me imaginé que me iba a salir con la mamada de que si no conozco a Jesús (¿Nuestro Señor?). Pero no, se refería a Chuy el del bar. ¿De qué bar? ¡De dónde vienes! Chin, no lo conoces. Después de convencerse que no conozco a Chuy se fue y se metió a otro bar que estaba por ahí!! De veras.

De verdad que si me hubiera encontrado con unas tres cheves más encima hubiera sido más divertido.

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