miércoles, 18 de noviembre de 2009

Según yo...

Según yo no iba a volver tener ninguna relación laboral con tec milenio. Sigo sin tenerla pero estuve a punto de meterme en un lío bastante grande. Nunca dije que si le entraba pero asumieron que al continuar la comunicación estaba de acuerdo y emocionado (sobre todo) para echarme más jale encima.

La verdad es que si me agradaba el proyecto. Pero todo empezó mal el jueves cuando tuve una reunión vía msn con las personas con las que iba a colaborar. Desde el principio el tipo (era un hombre y una mujer... con la chava todo bien desde el principio) me pareció que ya lo conocía. El trato y la manera de comunicarse me resultaban familiares. No me cayó bien. Todo su cotorreo se fue por el lado de que pensaba que yo no tendría tiempo para hacer el jale. Quiso que le diera el horario en el que me pondría a trabajar o que le pensaba dedicar al proyecto. Si algo me caga es eso, además el trabajo era en línea y se supone que uno lo puede hacer en el momento en que se le antoje, quiera o pueda. El caso es que su cotorreo no fue muy divertido. Al otro dia, el viernes, fui a hablar con él y me di cuenta que ese cabrón me dio clase... Nunca tuve problemas con él directamente (saqué 90 final creo) pero si era medio cagazón. Ni siquiera puedo recordar algo chistoso que hubiera dicho (bueno en clase de mate a veces no se presta para eso). Para no hacer la historia larga casi le pego... No le menté la madre nada más porque... no sé, ni por qué.

Mientras hablaba con él me puse a pensar en que uno de los aspectos que me gusta de la escuela en donde trabajo son mis compañeros de trabajo. Realmente ayudan y hacen la vida (¿laboral?) un poco más agradable. En el tec también me gustaba eso. En el único lugar en el que parecía que todos competían con todos fue en el del tec milenio. Era raro porque la de historia, ¿qué amenaza podía sentir de uno de matemáticas? Era (no sé si todavía) un grupo muy cerrado. Encontré muy difícil y complicado integrarme a ese ambiente.

La parte buena de la historia es que después de haberle dicho al señor ése "que dijo mi mamá que siempre no" me sentí bastante más relajado. No descansé gran cosa el fin de semana pero se hubiera puesto muy culero si me quedaba con ese jale. Aparte de todo es que después de haber batallado durante tanto tiempo con mi comité de tesis me siento harto de lidiar con personas como él. En fin. A lo mejor se me fue una buena oportunidad. Consideré que era mejor idea conservar "mi salud mental" (o la poca que tengo)...

Todo comenzó a cambiar desde el momento en que quise abrir un carro con mi credencial! Jaja. Eso me puso de buen humor (es que, ¿a quién se le ocurre querer abrirlo con una credencial? Me había pasado con la puerta del baño pero con el carro...) Luego el sábado, después de jetear casi toda la tarde, en el sabino me encontré a un tipo que me dio mucha risa. Le hablaba y saludaba a todo el mundo pero casi no le hacían caso. Cuando pusieron en la radiola una canción que se llama cuatro rosas se prendió casi todo el antro (bueno los que estaban en esa parte del antro). Este bato quiso bailar con una chava pero ésta no le hizo caso. Como no bailaba con ella se puso a bailar enfrente de ella (solo) mientras todos los que estábamos alrededor nos reíamos (a ella no le pareció chistoso... que mal pedo jaja). Luego de repente aplaudía y gritaba "¡sobres sobres!" y se reía solo. Se regresó a su lugar y me dijo que lo importante era divertirse. Saludaba a cuánta chava pasaba por ahí. Cuando volteaban se acercaba a decirme que ya tení a una segura... ¿segura para qué? Misterio.

Después cada vez que llegaba un camarada me presentaba como SU camarada. Una vez que intercambiaron saludos y platicaron un ratito los otros se iban y éste cuando se iban les gritaba "sobres sobres".

Y bueno, en realidad estuvo divertido.

(También estuvo divertido porque me estuve acordando de la vez que tomé un taxi en pino suárez y el señor no me quería llevar al lugar que iba porque iba a salir bien poquito. En eso apareció un mariachi (uno con guitarra) y dijo que nos llevaba a los dos. Ya que se subió me di cuenta que el señor andaba bien pedo. Se iba tambaleando sentado!! (lo raro es que no lo vi así cuando estaba de pie). Se quedó dormido un ratito (ni cinco minutos). Luego de repente se levantó para decir "hey yo por aquí no vivo"!!)

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